Las mujeres de Belén eran muy aseadas, por eso me gusta poner estas escobas en las casas.
Las coloco en rincones discretos, pero a la vista.
Están hechas de palo de esparto e hilo de pita atado con hilo de coser. Las prefiero así a la antigua. Me recuerdan las que tenía mi abuela en el pueblo
Saludos.